La música y Musicaeduca
Sin duda ésta es una compleja pregunta a contestar, no por falta de argumentos sino por lo contrario, ya que podríamos dar tantos motivos que resulta difícil priorizar.
La Música puede ser un entretenimiento, un estímulo, una excusa para el juego y la diversión, para el disfrute, para desinhibir, para sentir, para emocionar, para transmitir, para comunicar…
Lo cierto es que nos rodea la música en todos los momentos de nuestra vida, los pasajeros, los importantes, los afectivos, los insignificantes… y la prestemos o no atención no podemos evitarla, y forma parte de nuestro día a día como una fiel compañera.
Pero la música es muchas cosas porque constituye un vehículo incomparable para transmitir y sentir emociones, estados de ánimo, o muchas de aquellas sensaciones que uno mismo no es capaz de transmitir por otros medios.
La Música es un lenguaje, pero no hace uso de palabras, ni exige conocimientos previos, ni una edad determinada. Cuando la música irrumpe en nuestras vidas, sentimos la libertad de dejarla entrar a nuestra manera, y en base a nuestras propias experiencias nos vamos forjando un gusto y un uso muy personal e intransferible.
A través del conocimiento de la música, enriquecemos nuestra experiencia sonora y aumentamos el abanico de preferencias musicales. Pero no solo eso, a medida que la conocemos, adquirimos y utilizamos este nuevo lenguaje que nos sirve como herramienta para la expresión, la comunicación y como experiencia vital enriquecedora… mostrándonos senderos antes invisibles por donde caminar.
En este camino de la experiencia musical, al igual que el caminante utiliza sus piernas y tonifica sus músculos, con la música necesitamos el oído para percibir todos aquellos estímulos que nos ofrece: ritmo, timbre, altura, intensidad… que son parámetros del sonido que nos permiten disfrutar del hecho musical en toda su esencia. Con el tiempo, la experiencia, la diversidad musical y el propio desarrollo y madurez personal, la música encuentra su sitio en cada uno de nosotros, y en el camino deja siempre la huella de un desarrollo en la sensibilidad, percepción y capacidad de expresión, que nos acompañará de por vida.
Ya es de todos conocido que existen múltiples estudios científicos que demuestran que el aprendizaje musical en edades tempranas estimula y desarrolla conexiones neuronales que desde otro ámbito no es posible. El aprendizaje musical favorece además en los niños la receptividad, la concentración o la comunicación, influyendo notablemente en su desarrollo intelectual, psicomotriz y del lenguaje verbal o escrito, que sentará los cimientos para favorecer la comprensión analítica o matemática así como el aprendizaje de otras lenguas, entre otros.
La Música debería ser accesible a todos, con independencia de su condición física, intelectual, afectiva o social, y en Musicaeduca deseamos que además la música ocupe un lugar privilegiado en la vida de cada niño. Ofrezcámosles pues a nuestros pequeños alumnos la oportunidad de vivir la música en todas sus formas, a fin de favorecer su desarrollo global, y por supuesto, sin olvidar disfrutar al máximo en el camino.
Eva Alonso
Musicaeduca