Este curso, impartido por la directora de la Orquesta Musicaeduca Ana Barrilero y al que asistieron varios de sus integrantes junto a nuevas incorporaciones, ha sido una gran oportunidad para explorar los recursos y técnicas propios de la orquesta.

Tocar en una orquesta no es sólo la gran experiencia de compartir y tocar junto a otros músicos con diferentes instrumentos, sino que también es una oportunidad única para desarrollar aspectos que no siempre pueden trabajarse en la clase individual: la coordinación rítmica y la concentración en lo que uno debe tocar cuando otros están tocando algo diferente, el control de las dinámicas en conjunto y no sólo dependiendo de uno mismo, la capacidad para estar atento tanto a la partitura como al director y a los músicos de tu alrededor...

Pero muchas veces, por falta de tiempo en la mayoría de los casos, las orquestas se limitan únicamente a trabajar el repertorio para los futuros conciertos, sin profundizar en todas estas técnicas tan necesarias para producir un buen sonido de conjunto.

En este Curso de Técnica Orquestal se trabajaron varios de estos aspectos mediante diversos ejercicios: 

• - A través de un conocido coral de J.S.Bach, los alumnos aprendieron a distinguir cómo suena una orquesta cuando toca a unísono de cuando toca a dos, tres y cuatro voces. La polifonía es una de las principales características de la música de conjunto, y es importante que cada músico sea consciente de qué voz o papel está interpretando dentro de la misma.
• - Mediante ejercicios sencillos sobre una sola nota, un acorde o una escala, los alumnos fueron aplicando diferentes matices (forte, piano, crescendo, diminuendo...), ritmos y velocidades, según lo que les marcaba la directora. En estos ejercicios es fundamental escuchar el sonido final que produce el conjunto, y tratar siempre de que ningún instrumento sobresalga.
• - Una de las cosas más complicadas para muchos en la orquesta, a pesar de ser un momento en el que no tocan, es contar un número amplio de compases de espera sin perderse. Por ello, la directora Ana Barrilero ofreció diversos trucos a la hora de contar, además de exponer en la pantalla la partitura de "Piratas del Caribe", una pieza repleta de cambios de compás y de velocidad, para escucharla mientras todos contaban mentalmente los compases.
• - La percusión es muchas veces una de las secciones más "olvidadas" de la orquesta, pues muchas veces se piensa que sólo dan un par de golpes y apenas tienen que pensar... pero ¡nada más lejos de la realidad! Por ello todos los músicos de la orquesta cogieron instrumentos de percusión para realizar diferentes ejercicios rítmicos propios de los percusionistas de la orquesta. Muchos se dieron cuenta de que no es tan sencillo...
• - Improvisación sobre una serie de acordes. Con una serie de acordes expuesta en la pizarra, todos los alumnos crearon una pieza orquestal, pensando previamente en su estructura y qué secciones de la orquesta iban a tocar en cada parte.
• - Interpretación de cuatro piezas. Aunque todos los ejercicios anteriores son fundamentales, una orquesta tiene siempre un objetivo final: la interpretación de un determinado número de obras. En los dos días que duró el taller, la orquesta de alumnos interpretó cuatro piezas breves, haciendo previamente un análisis entre todos de la partitura y aportando ideas en cuanto a las dinámicas.

Pero la mayor actividad y mejor experiencia para todos fue la de convertirse en ¡directores de orquesta por un día! No hay nada mejor que coger una batuta y ponerse en el papel del director para comprender el funcionamiento de una orquesta. 

Todos los alumnos disfrutaron a lo grande de esta experiencia musical en grupo que sin duda nunca olvidarán.